jueves, 31 de mayo de 2018

Mamtak LeShabat Behaalotja 5778



Había una vez un yehudi que estaba buscando la verdad y decidió que estaba dispuesto a hacerlo todo con tal de conocer la verdad. Comenzó a buscar, indagar y preguntar; un día se encontró con un hombre muy sabio que le dijo: "Si de verdad quieres encontrar la verdad, debes trepar a la cima de la montaña en el horizonte y allí encontrarás la verdad".

El judío emprende el viaje y luego de unas semanas llega a la cima de la montaña, ve allí a algunas personas que señalan a otra montaña y le dicen: "si estás buscando la verdad, tienes que subir a la cima de esa montaña." Y así de montaña en montaña hasta que alguien le dice: "No te desesperes, te queda una montaña y encontrarás la verdad."

El judío se emociona por la noticia y sube rápidamente la última montaña. Cuando llega a la cima de la montaña, una magnífica vista emerge ante sus ojos. Toda la montaña está llena de vasos de aceite y mechas, se encienden velas, algunas de las copas están llenas y otras menos. Frente a él está sentado un anciano y le sonríe. Le dice entonces: "estoy buscando la verdad". Y el anciano le dice: "Aquí está la verdad, bienvenido al mundo real..."

El judío pregunta qué está pasando aquí y el anciano le explica: cada persona en el mundo tiene un vaso lleno de aceite, y al momento que nace y sale al mundo la mecha se enciende y el aceite comienza a agotarse. En algunas personas el aceite se consume más rápido y por lo tanto viven vidas más cortas mientras que otras el aceite prende lentamente y viven vidas más largas.

El asombrado judío pregunta de inmediato "¿dónde está mi vaso?". Y el anciano le dice: Tu vela está en la fila 237, vela n°96. Se acerca rápidamente a su vela y se sorprende al ver que su aceite casi se está acabando, mira a su derecha e izquierda y percatándose que nadie lo ve, toma la vela del vecino y va a servirse un poco, "sólo un poquito, algunos años más...". En ese momento aparece el anciano, agarra de inmediato su mano, lo mira a los ojos y le pregunta: "¿No estás buscando la verdad?..."

Nuestra parashá comienza con el mandamiento a Aharón HaKohen, בהעלותך את הנרות אל מול פני המנורה יאירו שבעת הנרות, "cuando enciendas las velas, al frente de la Menorá, las siete velas alumbrarán". En la Menorá del Templo había siete velas y cuando estaban encendidas, todas las llamas tenían que dirigirse hacia la vela del medio.

En Jasidut, se explica que las siete velas simbolizan siete tipos de Yehudim, que a pesar de la diferencia en su forma de servir a Hashem, deben estar dirigidos al mismo lugar y aspirar al mismo propósito: la morada de la Shejiná en el mundo.

**

Una vez escuché una discusión entre dos mochileros y uno decía: "Cada uno tiene su propia verdad" El segundo decía:" Hay una sola verdad." Cuando me pidieron que diera mi opinión, les dije: "ambos tienen razón, obviamente como judíos tenemos un camino claro que hemos recibido desde la entrega de la Torá, Moshé Emet Vetorató Emet. 

Y cuanto más nos apeguemos a esta verdad, mejor se verá el mundo y alcanzará el objetivo de su creación. Sin embargo, Hakadosh Baruj Hu le dio a cada persona su camino personal derivado del lugar donde nació, de la educación que recibió y de lo que aprendió durante su vida. A esto es que viene este Pasuk y nos enseña: Es cierto, hay siete diferentes senderos, pero siempre debemos recordar, "al frente de la Menorá las siete velas alumbrarán",debemos asegurarnos de que mi verdad personal esté dirigida y acorde al plan general de Hakadosh Baruj Hu, de que el mundo sea un lugar mucho mejor.

Y cuando cada uno de nosotros haga lo suyo, todas las pequeñas velas se juntarán y se convertirán en una gran antorcha de la verdadera y completa Gueulá que vendrá pronto realmente.

Shabat Shalom!
R' Nejemia Vilhelm
Beit Jabad Bangkok, Tailandia
Traducido por JasidiNews 



De un Yejidut con el Rebe: Tefilat Shajarit con Minián es la clave del éxito en todos los asuntos



De un Yejidut con el Rebe: Tefilat Shajarit con Minián es la clave del éxito en todos los asuntos

De un extracto del Yejidut de Rab Yaakov Meir Gatz 'שי (Magazine Beit Mashiaj, número 879, p.39):


"El Rebe me dijo que el secreto del éxito en todo asunto en la vida es el orden (Seder), y el Rebe me contó sobre el Tzemaj Tzedek que la gente le preguntó cómo alcanzó a escribir tanto junto con su vasto liderazgo. Y el Rebe le respondió porque era Mesudor (una persona ordenada). Tenía horas regulares y fijas para escribir y cuando se acababa el tiempo, se detenía, incluso si estaba en el medio de escribir una oración.

En este momento, el Rebe sonrió ampliamente y preguntó: "¿Y cuál es la clave del orden?" Entonces el Rebe respondió él mismo: Tefilat Shajarit con Minián. La Tefilá de la mañana es como Rosh Hashaná donde su efecto repercute durante todo el año. Si la Tefilá es adecuada, todo el día se ve diferente. Tal como el cuerpo humano, si la cabeza funciona correctamente, entonces todos los órganos funcionan bien, y para comenzar el día con el pie derecho es imprescindible que la Tefilá sea precisamente con Minián. Y el Rebe dijo que si rezas sin minián, entonces ese día es un día "sin piernas ni manos", está desordenado y escurridizo.

Finalmente, el Rebe explicó la Maalá (virtud) de la Tefilá precisamente con Minián. El Rebe explicó que la Tefilá con Minián salva a uno de los pensamientos vanos. Cuando rezas con Minián también hay pensamientos vanos, pero ¿qué son?" Preguntó el Rebe, y enseguida respondió (a modo de ejemplo de los pensamientos en el Minián): "¿Deberíamos rezar más rápido o más lento, si pasarlo al Jazán o esperarlo, y estos pensamientos vanos son completamente diferentes (entonces el Rebe levantó la mano como alguien que está analizando profundamente)...

miércoles, 30 de mayo de 2018

Instantáneas 11 - Anécdotas cortas con el Rebe - Sensibilidad

Número 11Suavizando con humor 

Una vez una persona vino a Yejidus, y se quedó en la habitación del Rebe durante más de cuarenta minutos. Conseguir la atención individual del Rebe durante tanto tiempo era algo inaudito. El mazkir, viendo que el visitante no se iría solo, tocó a la puerta y le dijo que era hora de irse.
El invitado, siendo que era su primer yejidus, no estaba familiarizado con el protocolo aceptado. Parecía muy ofendido. El Rebe, siempre sensible a otro Yehudi, vio su cara decaída, y de inmediato le explicó con ligero humor: "El secretario no quiere que te vayas; simplemente desea interrumpir nuestra reunión para que podamos reunirnos dos veces!".
El invitado se fue con una sonrisa.

lunes, 28 de mayo de 2018

14 de Sivan - R' Jaim MiVolozin


זכרון לצדיקים

R' Jaim MiVolozin (Yortzait 14 de Sivan 1821) fue de los grandes de su generación, el discípulo mas prominente del Gaon de Vilna. Fundador de la Yeshiva Etz Jaim, la afamada Yeshiva  de Volozhin (cuna de las Yeshivot Litaiot).

R' Jaim MiVolozhin fue el único de los Talmidim del Gaón de Vilna que no tomó parte (ni quiso involucrarse) en las reuniones que organizaban los Misnagdim contra los Jsidim y contra toda la línea del Baal Shem Tob. Además, llevó una muy buena relación con el Miteler Rebe y más tarde con el Tzemaj Tzedek. (Varias veces conversaron sobre temas halájicos.) De hecho, en unos de los asuntos más destacados en Torat Hajasidut, el concepto de Tzimtzum le da la razón al Alter Rebe (Tzimtzum no en su sentido literal), y discute en este punto con su maestro el Gaón de Vilna que sostiene el Tzimtzum (de la presencia Divina y Su supervisión en este mundo) en su sentido literal.


Una anécdota:

Una vez mandó R' Jaim MiVolozhin un Shliaj a preguntarle al Alter Rebe: ¿por qué los Jasidim dedican tanto tiempo al estudio del Jasidut y al Davenen, y menos tiempo al estudio de Nigle? si mismo ud. (el Rebe) cita el dicho de la Guemará (Shabat 31a): "el ejemplo de una persona que manda a su criado que le suba un Kur (medida grande) de trigo...le preguntó luego el amo: ¿mezclaste (en el trigo) un Kab de Jumtin (material que conserva)? Le dijo que no, a lo que el amo le respondió: Mejor era si no subías nada entonces...", explicando que el mismo Alter Rebe define a Jasidut como el "Kab Jumtin", el conservante, y en proporción (un Kab de conservante a un Kur de trigo) es 1/180 veces, lo mismo debería ser entonces con el Jasidut, solo una mínima parte del día (1/180) dedicarla al Jasidut.

Le respondió el Alter Rebe: La Guemará ahi dice ""עירבת "¿mezclaste?", se necesita  אויסמישן mezclar y remezclar, y para eso se necesita mucho tiempo.

(Parece que el mezclar el Jasidut dentro del Nigle toma mucho,mucho tiempo...)

domingo, 27 de mayo de 2018

Instántaneas 10 - Anécdotas cortas con el Rebe - Sensibilidad

Número 10

Comprendiendo su situación (la de ellos)


Para el Shabat siguiente a Shavuot 5745, el Instituto Aleph trajo un grupo de dieciocho prisioneros judíos a Crown Heights para un Shabatón. Naturalmente, el farbrenguen de Shabes del Rebe sería el punto culminante del fin de semana.
Minutos antes de que comenzara el farbrenguen, Reb Leibel Groner se acercó a Reb Sholom Ber Lipsker, el coordinador del Shabatón. Le indicó que dispersara al grupo de forma tal que cada persona permanezca separada.
Reb Sholom Ber respondió con una mirada interrogadora. Él ya había hecho los arreglos para que todos juntos se presentaran como un grupo, y el cambiar los planes sería un desafío logístico. Reb Leibel le explicó que esta era una petición explícita del Rebe. El Rebe sintió que si los prisioneros se sentarían en grupo, llamarían la atención y la gente podría hablar de ellos. Los prisioneros ciertamente se sentirían incómodos.
"Por esta razón", continuó Reb Leibel, "el Rebe también ha dicho que no les dará mashke, como era la práctica usual del Rebe cuando venían otros grupos. El Rebe no quiere llamar la atención a ellos, para evitar que se sientan avergonzados".

jueves, 24 de mayo de 2018

Mamtak LeShabat Nasó 5778



Había una vez un niño pobre cuyos padres habían fallecido y quedó solo en el mundo. Uno de sus buenos vecinos lo tomó y lo crió, lo envió a la escuela a estudiar y se encargó de todo lo que necesitara. Finalmente, el buen hombre le dio una casa y dinero para abrir un taller, y pronto el joven se hizo muy rico.

Un día, la rueda se dio vuelta y el hombre que le hizo tantos favores perdió todo su dinero y quedó pobre. El hombre pensó para sí mismo: "Iré a lo del muchacho por el cual me he estado preocupado durante tantos años y le pediré ayuda, probablemente estará feliz de ayudarme". Y se dirigió a lo del joven que lo recibió alegremente.

El joven estaba muy triste al escuchar sobre la condición del hombre que lo había ayudado tanto, y decidió ayudarlo, pero sin avergonzarlo ni humillarlo. Le dijo: "Ahora me es difícil darte dinero, pero intentaré ayudarte y hablaremos más tarde".

Tan pronto como salió el pobre, el joven llamó a uno de sus sirvientes, lo vistió con ropas viejas y rotas, le dio un diamante muy caro y lo envió a la casa del buen hombre.

El sirviente caminó frente a su puerta y cuando el hombre salió se acercó a él y le preguntó: "¿Te gustaría comprar un bonito diamante, a muy buen precio?" El hombre vio que el diamante era muy hermoso y preguntó: "¿Cuánto cuesta?" El muchacho respondió: "¡Un dinar! El hombre le dio un dinar que todavía le quedaba y compró el diamante.

Unos días más tarde, el joven una vez más envió a la casa del buen hombre a uno de sus sirvientes vestido con ropas elegantes y lujosas y dándole mucho dinero. "Escuché que vendes piedras preciosas, ando buscando un lindo diamante tal vez tienes uno en venta?". El hombre sacó el diamante que había comprado hace unos días y se lo mostró al comprador.

El sirviente dijo: "Exactamente esto! me lo venderías a mil dinares?", y el hombre accedió gustosamente a venderle el diamante al sirviente y el sirviente se lo devolvió a su amo. Al día siguiente se dirigió contento el buen hombre a la casa del joven y le dijo: "B"H me salió un muy buen negocio, ya no hace falta que me ayudes! Ahora podré vivir en amplitud nuevamente"

**

En la parashá de esta semana, leemos el Pasuk, "Y toda donación... que ofrecerán al Kohen para él será". Jazal aprenden de aquí que los primeros frutos deben darse a los Kohanim.

Pero deben ser llevados al Beit Hamikdash, como dice, "Traerás a la casa de Hashem, tu Di-s" y sólo entonces se los da a los Kohanim. Aparentemente, parece una mera molestia, si alguien tiene un vecino Kohen, por qué debería trasladarse hasta el Beit Hamikdash y solo entonces hacerle entrega de los Bikurim al Kohen, por qué no al lado de su casa?

Explica esto Torat Hajasidut que el propósito de los Bikurim (primeros frutos) es fijar en la consciencia de la persona que estos primeros frutos le pertenecen a Di-s. Por lo tanto, su primer lugar es la casa de Hashem.

La mitzvá de los Bikurim es tomar la primera y la mejor de las frutas y dárselas a Di-s. Este mandamiento enseña a la persona a relacionar toda la abundancia que recibió de Di-s como propiedad de Di-s y que él recibió el derecho de usarla. Cuando la persona se dirige con este enfoque hacia su propiedad y sus bienes, le será mucho más facil dar Tzedaká y mucho más facil sentir cuán obligado está el en ayudar a todos los que lo necesitan de la manera más bella, como el Todopoderoso querría que se haga.

Yehi Ratzón que tengamos siempre el mérito de estar del lado de los que dan y entender el gran privilegio del dar y  que en Zejut de la mitzvá de Tzedaká, merezcamos la Gueulá Shlemá que llegará muy pronto.

Shabat Shalom!
Rab Nejemia Vilhelm
Beit Jabad Bangkok, Tailandia
Traducido por JasidiNews

miércoles, 23 de mayo de 2018

Cómo un Shliaj dejó de fumar


El rabino Avraham Levitansky (Yortzait 10 de Sivan), Shliaj de Jabad en S. Monica, California, fumaba, especialmente durante los momentos de gran estrés. Durante la década de 1970, cuando dirigía el Camp local Gan Israel, a menudo lo veían con un cigarrillo en la mano.

Uno de los donantes y partidario del campamento le dijo varias veces que fumar era perjudicial para su salud. El rabino Levitansky fue cortés pero no prestó mucha atención a los comentarios.

Finalmente, el hombre le dijo: "Escucha, si no paras, le escribiré al Rebe".

"Si quieres, no puedo detenerte", respondió el rabino Levitansky, con ligereza.

Poco tiempo después, alrededor de la medianoche, el rabino Levitansky recibió una llamada telefónica. Era el Dr. Nissan Mindel, uno de los asistentes del Rebe. El Rebe le había pedido que transmitiera un mensaje:

"Llegó un informe que dice que no se siente bien y que no se cuida. Esto es muy sorprendente, siendo usted un emisario, y un emisario es un soldado, y cuando un soldado se descuida, afecta esto sobre todo el ejército..."

El rabino Levitansky estaba sorprendido. "Físicamente me siento bien. ¿Quizás el Rebe se está refiriendo a mi estado espiritual?"

"Estuve recién en el estudio del Rebe, y puedo asegurarte que el Rebe no estaba para nada preocupado por el estado de tu espiritualidad", dijo el Dr. Mindel.

El rabino Levitansky entendió el mensaje y dejó inmediatamente de fumar.

***

El hijo agregó luego algunos detalles: 

"El Lashón exacto que escuchó mi padre de R' Nisan Mindel, en nombre del Rebe:
ס'איז אנגעקומן א ידיעה אז ער פילט זיך ניט גוט, און [פון דעסטוועגן] ער געבט ניט אכט אויף זיך - איז עס דאך א פלא גדול, ווארום ער איז דאך א שליח, און א שליח איז א סולדאט, און א סולדאט, אז ער פארנאכלייסטיגט זיך, פועל'ט ער א חלישות אין די גאנצע ארמיי
En el momento de aquella llamada telefónica, mi padre tenía un cigarrillo en su mano, en el momento de oir tales palabras, lo procede a apagar y desde ahí nunca más fumó.

En nuestra casa, sobre el estante de libros, hay (hasta el día de hoy) medio paquete de cigarrillos. De vez en cuando, cuando había mucha presión en el Beit Jabad, mi padre pedía que le bajaran los cigarrillos,  los olía y decía: "Oh, tanto que necesito ahora un cigarrillo, pero no puedo..."

Parece que en tiempos de dificultad a mi padre le bastaba oler el cigarrillo, el "Tabak", para recordarse a si mismo que el Rebe piensa en él y que es importante para él que su Gashmiut (materialidad) es importante.

Que merezcamos ser verdaderos Shlujim del Rebe y entender el mensaje de que un Shliaj es un soldado y que lo que hace repercute en todo el ejército, y ojalá que tengamos tan claro que el Rebe no está  tan preocupado por nuestro estado espiritual (como por nuestro cuidado físico).

Lejaim!


Jasidishe Maise: Soy como el tronco de un grueso árbol


Por R. Sholom Avtzon

Durante un Jasidishe Farbrenguen , el famoso Josid Reb Moishe Rubin dijo: "Sé que lo que voy a decir puede parecer hipócrita, ¿quién soy yo para decirles a otros que son mejores que yo, cómo es que un Yehudi y un Josid deben conducirse, az ij alein halt nisht derbei - cuando yo mismo no estoy en ese nivel? Entonces, antes de decir lo que tengo en mente, contaré el siguiente Moshol que escuché de Jsidim mayores.

Un Josid viajaba siempre a su Rebe, a Lubavitch. En aquellos días, uno no tenía dispositivos que pudieran darle instrucciones, por lo que se ubicaban con puntos de referencia y carteles (de tránsito)  para ayudarse en el camino. Así que cada vez que este Josid llegaba a un cruce de caminos o bifurcación en el camino, miraba el cartel y seguía la flecha que apuntaba hacia Lubavitch.


Sucedió una vez que dos Jsidim viajaban juntos. Cuando llegaron a cierta intersección en el camino, uno de ellos siguió el letrero y giró hacia ese cruce. Su compañero le dijo, creo que se supone que debemos ir en la otra dirección.

Al ver que la persona no estaba dando la vuelta (no le hacía caso), afirmó: Si fuera que estarías viajando con un carretero que él también quisiera estar con el Rebe en Lubavitch, entonces entendería por qué sigues sus instrucciones. Después de todo, él también desea llegar allí. Pero el cartel en el tronco de ese árbol no va a Lubavitch. De hecho, no se mueve en lo absoluto. Se está quedando en su propio lugar. ¿Entonces, por qué lo escuchas?!

La persona respondió: "Tienes razón. El árbol es una tosca pieza de madera. No tiene sentimientos ni comprensión. No se moverá de su lugar. Pero el hecho es que el cartel, el letrero, no miente ni engaña a nadie. Está diciendo la verdad, y estoy dispuesto a escuchar la verdad de quien sea la dice.

Reb Moshe concluyó, lo mismo es aquí. Mencionaré un punto que puede estar faltando en mí mismo. Entonces, ¿cómo puedo decir que así es como uno debe comportarse, si yo mismo no lo hago? Estoy diciendo que tenemos que hacer Davenen mejor y todos pueden ver que mi rezo no es como debería serlo. Esto es especialmente problemático, porque no es la primera vez que menciono la importancia de hacer davenen correctamente, y todavía no me afectó. Como aquel árbol, no me estoy moviendo en esa dirección, ¡me quedo quieto!

Sin embargo, usteden son Jsidim y pueden "oler" la verdad. Incluso si no estoy en ese nivel, esto es lo que escuché de los Jsidim mayores. Así que sí, tal vez soy a shtik holtz, (duro o 'chato') y no me afectó. Pero yo soy el tronco de árbol sobre el que esos grandes Jsidim colocaron el cartel con las indicaciones y las siguieron, que fueron verdaderos y su mensaje es real.

***

Escuché este vort del rabino Kasriel Kastel, cuando en una conversación con él sobre cómo debo responderle a alguien que me preguntó cómo mejorar su observancia del Shabat, dijo: "Explícale que debe esforzarse por mantener el pnimius del Shabat, no solo las leyes del Shabat, como escribe el Alter Rebe al final del Kuntres Ajaron.

Fue entonces que le respondí: tengo que estar en ese nivel para exigirlo a los demás.

Como respuesta, me contó esta anécdota que había oído de Reb Moishe Rubin.

Como nota personal: todos saben que Reb Moishe hacía un Davenen adecuadamente, tal vez sentía que todavía debía ser mejor.

martes, 22 de mayo de 2018

Maise: Cómo se acercó el Baal Hatoldot al Baal Shem Tob


Al haber pasado recién Jag Hashabuot, entre otras cosas fecha del Yortzait del Baal Shem Tob, una linda historia, contada por R' Shmuel Groinem, Mashpia en Lubavitch:

El Baal Shem Tob llegó bien temprano a la ciudad de Sharigrad (donde servía entonces como Rab el Gaon "Toldot Yaakob Yosef"), y se paró sobre su carreta allí en el centro del mercado. A las personas que se dirigían al Shul el Baal Shem Tob los llamaba y les hablaba, contándole poderosas y emocionantes historias.


Cuando el "Toldot Yaakob Yosef" llegó al Shul, y notó que no había nadie le preguntó a su Shamesh ¿Qué pasó hoy que no vienen? a lo que le respondió que había un Yehudi en el centro del mercado que está relatando historias y todos lo están escuchando. Y le dijo de inmediato al Shamesh: Ve y avísales a todos que vengan de inmediato a hacer Davenen! Fue el Shamesh a cumplir su diligencia, más al llegar y oir de las palabras que salían de boca del Baal Shem Tob, se quedó él allí también ahí...
Finalmente fue el mismo "Toldot Yaakob Yosef" a llamar a todos los presentes, pero al acercarse y escuchar, entraron las palabras en su corazón, y fue de entonces que se acercó al Baal Shem Tob.

La historia que contó entonces el  Baal Shem Tob  al momento que llegó el "Toldot Yaakob Yosef":
"En una ciudad vivía un costalero (que cargaba y llevaba cosas) que lo único que sabía era rezar. Llegaba al Shul temprano por la mañana a decir Tehilim y rezar con el Minian, y durante todo el día se dedicaba a su duro y fatigoso trabajo. Para Minja llegaba nuevamente al Shul para rezar con un Minian, y entre Minje y Maariv participaba de un Shiur de Ein Yaakob que daba un Melamed para gente simple como él.
En su mismo barrio vivía un Abrej que no tenía el yugo del trabajo sobre su espalda, y cuando iba al Shul rezaba con tranquilidad, y luego del Davenen se ponía a estudiar un Shiur de Guemara en profundidad. De la misma forma, llegaba una hora antes de Minja para estudiar intensamente, y su rezo era calmo y con concentración, y también entre Minja y Maariv estudiaba para sí.
Cierta vez, luego de Maariv, se encontraron los dos en la puerta, el jornalero sacó un profundo suspiro, como diciendo que su propia Tefilá y estudio no son como tendrían que ser. El Abrej, por su parte, al oir tal suspiro, echó una carcajada, como diciendo ¿qué tenés para comparar? Sos un simple hombre que ni tiene comparación a la Torá y Avodá que yo dedico.
Luego de varios años, cuando ambos dejaron este mundo, y llegaron al Beit Din Celestial, los ángeles defensores colocaron sobre la balanza todas las Tefilot y todo el estudio del Abrej, pero vino un ángel acusador y colocó del otro lado la riza burlona, que hizo inclinar toda la balanza
Y al jornalero, le colocaron los ángeles defensores en su propia balanza su profundo suspiro, que le hizo inclinar toda la balanza para bien."

Esta historia fue la que hizo acercar al Gaón el "Toldot Yaakob Yosef" al Baal Shem Tob para terminar siendo uno de sus más grandes discípulos.

Reshimot Devarim, contada por R' Yehuda Jitrik, que la oyó directamente de R' Shmuel Groinem

Instántaneas 9 - Anécdotas cortas con el Rebe - Sensibilidad

Número 9Posponer las cartas


Yejidus había terminado en las primeras horas de la madrugada, y el Rebe le pidió a Reb Leibel Groner que trajera el correo. Después de ocuparse de una pila, el Rebe pidió otra. Y luego otra.
Reb Leibel sabía cuán extenuante era Yejidus para el Rebe, y se percató que estas cartas mantendrían al Rebe despierto hasta Shajarit. Pero, por otro lado, un Mazkir debe hacer lo que le dicen. Sin atreverse a sugerirle nada al Rebe, Reb Leibel ideó un plan. Escribió una nota sugiriendo posponer el correo para mañana, y la colocó encima del siguiente montón de cartas que el Rebe solicitó.
Cuando el Rebe vio la nota, levantó la vista, sonrió y comentó: "¿Quieres que deje también esta carta para mañana?" Y el Rebe continuó lidiando con las necesidades de Klal Israel durante toda la noche.

jueves, 17 de mayo de 2018

Mamtak LeShabat Bamidbar 5778



Había una vez un dueño de una fábrica de zapatos que quería expandir su negocio. Envió a uno de sus gerentes a África para explorar nuevos mercados de exportación.

El gerente llegó al continente después de semanas de navegación, bajó del barco y vio que todos los habitantes caminaban descalzos y ni sabían qué son zapatos. Regresó inmediatamente y le dijo al dueño de la fábrica: "Llegué allí, vi que nadie sabía qué son los zapatos, no hay chance de que logremos vender ni siquiera un par".

El dueño de la fábrica no se dio por vencido y envió a otro gerente, el segundo gerente llegó al otro extremo del continente, bajó del barco, vio a todo el mundo descalzo y enseguida le escribió un telegrama al dueño: "Nadie aquí tiene zapatos. Hay aquí un tremendo potencial para vender millones de pares."

*

En Parashat HaShavua comienza el Libro de Bamidbar, que habla de los viajes del pueblo de Israel en el desierto. Nuestra Parashá nos cuenta acerca de la división de los Leviim para llevar el Mishkán y sus objetos, y cómo erigían el Mishkán en cada lugar donde Bnei Israel acampaban. Cuando vemos esto, surge una pregunta: ¿cómo se puede construir una vivienda (Mishkán) en el desierto, que implica este un lugar desolado donde no hay rastro de judaísmo? ¿Y cuál es la necesidad de un Mishkan en ese lugar?
Sin embargo, aquí la Torá nos transmite un mensaje muy importante. Muchas veces nos encontramos en la vida con situaciones 'desérticas', ya sea a nivel personal o a lugares donde terminamos llegando (en general), ya sea un desierto físico o un desierto espiritual, y podría uno pensar que en un desierto es imposible erigir un Mishkán, ('cuando me voy de paseo, de vacaciones, no puedo cuidarme tal como lo hago en mi casa', o ' mientras no esté yo espiritualmente perfecto y apropiado, no puedo influir sobre otros', etc.) La Torá viene y nos enseña que donde sea que un judío construya un Mishkán y haga morar la Shejiná de Hakadosh Baruj Hu, debe comprender que su vida gira en torno al Mishkán. Por lo tanto, aún cuando llegue a cierto lugar por un período corto de tiempo y ese lugar parezca un desierto físico o espiritual, hará todo lo que sea necesario para erigir aún en ese lugar y en ese poco tiempo un lugar de morada para Hashem y difundirá la luz de la Shejiná a todos los lugares.

Yehi Ratzón, que tengamos el mérito de lograr erigir un Mishkan en cada lugar, y en este Zejut, mereceremos que Hakadosh Baruj Hu nos construya el Beit Hamikdash Hashlishi (Tercer Templo) muy pronto.

Shabat Shalom!
Jag Sameaj!
Rab Nejemia Vilhelm
Beit Jabad Bangkok, Tailandia
Traducido por JasidiNews


¿Por qué llevar a los chicos/bebés al Shul?


¿Por qué llevar a los pequeños al Shul?


"Hay algunos que argumentan: ¿Cuál es el beneficio de llevar a los niños al Shul para la lectura de Aseret Hadibrot cuando no entienden lo que está pasando?

Hay una directiva clara en la Torá con respecto a este tema. Más aún, es un episodio que sucedió concretamente, maase rav:

Está escrito que cuando Rab Yehoshua ben Janania era un pequeño niño, su madre lo traía al Beit Midrash... y la Torá que escuchó cuando era bebé lo afectó e hizo influencia, a la medida tal que se convirtió en uno de los más grandes sabios de su generación... Ahora, esto fue dicho sobre escuchar las palabras de Torá de las personas mientras estudiaban en un Beit Midrash, donde [se estudia Torá Shebeal Pe y] la comprensión juega un papel muy importante [y, sin embargo, tuvo un efecto tremendo en un pequeño]. Cuánto más es esto cierto con respecto a la lectura de la Torá [Shebijtav en el Shul], donde existe la Mitzvá de estudiar incluso sin tener comprensión..."

(Likutei Sijot, volumen 23, página 257)


*) Este año al caer domingo (que no tienen clases) , se pueden convocar a muchísimos chicos más, y de todas las edades!!

miércoles, 16 de mayo de 2018

Instántaneas 8 - Anécdotas cortas con el Rebe - Sensibilidad

Número 8

¿Por qué asustar a Yehudim?

Reb Itchke Ganzburg, el legendario activista de Jabad en Eretz Isroel, ideó un método original para difundir los mensajes de Torá por todo el país.
Abastecería con miles de panfletos a una compañía de aviones ligeros, y antes de cada Jag, los aviones sobrevolarían las ciudades y repartirían los folletos.
Con la aprobación del Rebe, este proyecto arrancó y mostró mucho éxito durante unos años. Pero en la víspera de Purim 5729, el Rebe de repente envió un mensaje a Tzeirei Jabad en Eretz Isroel, que no enviaran más estos aviones.
En un yejidus con Reb Itchke, el Rebe explicó su directiva:
"Debido a la frágil situación de seguridad en Eretz Isroel, cuando la gente escuche el sonido de los aviones, puede que entren en pánico. Entonces pensé para mí, ¿por qué asustar a Yehudim?"
Reb Itchke salió del Yejidus inspirado y admirado: el Rebe, que nunca había estado en Eretz Isroel, fue tan sensible a semejante detalle de la vida allí, ¡mientras que ninguno de los activistas locales lo había pensado! "Cuando te importa", dijo, "realmente te pones en sus zapatos".

lunes, 14 de mayo de 2018

Un milagro en el río

"¡Ey! ¡Esperen!" se oyó la exclamación en el espacio abierto.

Un residente del asentamiento de Neve Daniel en Gush Etzion, y el invitado que caminaba junto a él detuvieron su marcha por el camino que conducía al río Ein al-Kasis, cerca del asentamiento.

Era un viernes rutinario, 27 de Sivan, 5766. Los jóvenes querían sumergirse (hacer Tebilá) en las aguas del manantial, como solían hacerlo varios cada viernes por la tarde. Ante la llamada, se detuvieron y dieron media vuelta. Vieron a Moshe BenJamu, su vecino, venía hacia ellos desde la distancia. "Vamos, regresamos al asentamiento", dijo Moshe. "Abrieron la nueva mikve!".

El residente y su invitado dieron media vuelta y se unieron a Ben-Jamu. Ninguno de ellos imaginó que sus vidas acababan de salvarse.


La historia comienza con R' Alexander Luketsky (Z"l), un Jasid Lubavitch, residente de Neve Daniel, quien pasó la mayor parte de su vida en la Unión Soviética Comunista. Alexander falleció recientemente, este último Shabat (Parshat Emor) a causa de un paro cardíaco, y la gente del Ishuv quisieron revelar su parte y mérito en esta maravillosa historia.

Alexander, o 'Sasha' como lo conocían, nació en Moscú en 1948. Sus padres ya habían crecido bajo la sombra del régimen comunista, que logró arrancar casi toda huella de la vida judía, pero los remanentes de la herencia judía los recibió de su abuelo, que ocasionalmente lo llevaba a la sinagoga de Jabad, "Marina Rotsha' que luego sería rescatada para convertirse en un magnífico centro judío. Allí Sasha aprendió a reconocer su judaísmo. Este conocimiento lo impregnó y con los años daría forma a su personalidad.

Sirvió en el Ejército Rojo, estudió en la universidad y allí conoció a su futura esposa. Ambos gradualmente comenzaron a acercarse a sus fuentes y comenzaron a solicitar la inmigración a Israel, pero fueron rechazados. Durante aproximadamente diez años fueron rechazados.

En aquel tiempo, la pareja se unió a las actividades clandestinas de los jasidim de Jabad con el fin de inculcar el judaísmo bajo las narices de la policía secreta, y Sasha se convirtió en el Gabai del Shul Marina Rotsha, e incluso logró contactarse con el Rebe de Lubavitch en Nueva York y mantener una comunicación. Bajo instrucción del Rebe construyó una mikve dentro de la sinagoga, para disgusto de las autoridades del gobierno, que hicieron cerrar la mikve, pero Sasha que estaba hecho de hierro volvió a abrirla.

Incluso cuando finalmente emigró a Israel a fines de la década de 1980, no descansó, y continuó con un trabajo incesante en Neve Daniel, donde eligió vivir. Entre otras cosas, se propuso la construcción de una Mikve para hombres en el Ishub (asentamiento).

El asentamiento aún era joven. Sin embargo, Sasha comenzó a presionar al comité comunitario, y especialmente al presidente Aharoni Noiboer, para que estableciera una mikve que sirviera a los residentes que tenían que descender hasta el oculto manantial para sumergirse.

La determinación de Sasha lo arrastró también a Noiboer. Se unió al proyecto con todo su entusiasmo. En la primera etapa, obtuvieron presupuestos para la construcción. Luego vinieron los planes. Los trabajadores comenzaron con la obra.

Fue un proceso largo y arduo, que duró muchos meses. Finalmente, un jueves, el edificio estaba casi perfecto, con electricidad, agua y muebles. Sasha y Noiboer veían entusiasmados el sueño hecho realidad y se dijeron el uno al otro: "Vamos, vayamos al rabino".

Se dirigieron a la casa del rabino Matania Ben Shajar, el rabino del asentamiento (hasta hoy en día), y pidieron su consentimiento para inaugurar la mikve ese mismo viernes. El rabino vaciló: todavía no se habían instalado los rieles de seguridad, y había otras extensiones que aún no se habían hecho, pero Sasha presionó y no aflojó. "Traeremos al contratista y él trabajará continuamente, hasta que la Mikvah quede completa", prometió al rabino. Se miraron el uno al otro y se dieron cuenta de que tendrían que dar vuelta mundos para terminar en las pocas horas todo lo que necesitaban.

El contratista fue llamado, y la baranda de seguridad fue instalada. El lugar fue limpiado y pulido, y ese viernes se envió un aviso al público sobre la gran inauguración. Había gran alegría en la comunidad. Un gran grupo de residentes, entre ellos Sofrim Stam y otros, que iban regularmente al río, agradecieron a todos los involucrados en el trabajo por su logro especial.

Eran la una del mediodía. Las preparaciones para Shabat estaban en pleno apogeo. De repente, una fuerte explosión sacudió la paz del asentamiento.

Las fuerzas de seguridad fueron llamadas al área. El humo de la explosión los llevó a los bosques montañosos y rocosos, no muy lejos, a solo doscientos metros del camino de entrada.

En poco tiempo, la magnitud del milagro fue clara: terroristas colocaron una bomba junto al río Ein al-Kasis. La carga estaba destinada a explotar justo cuando los residentes solían venir. Pero nadie estaba en el manantial en ese momento. Todo gracias a la terquedad de Sasha Luketsky.

Una gran alegría estalló en el Ishuv al oír del gran milagro, y este día quedó grabado en la memoria del Ishuv hasta hoy, e incluso hay una iniciativa para marcarlo como un "día milagroso" todos los años.

"Fue el milagro de Sasha", dice Aharoni Noiboer, "un milagro de determinación y Mesirut Nefesh. Aprendí de esto una lección para la vida: cuando te encuentras en una encrucijada de dar y ser responsable, debes continuar, esto salva vidas. Esto fue lo que me impulsó para moverme en el desarrollo de Gush Etzion. Así era él: un hombre formado de Emuná, que nada podía moverlo de su objetivo. Que sean estas palabras Leilui Nishmató".

(Relatado por Aharon Noiboer, para 'Sijat Hashabua')





domingo, 13 de mayo de 2018

Instantáneas 7 - Anécdotas cortas con el Rebe

Número 7
No estarán con sus familias

Reb Leibel Groner relata:
"Un año, al final de Tishrei, había una lista de mil quinientos invitados, todos esperando su turno para Yejidut, antes de su viaje de regreso a casa. Yejidut en esos días era los martes y miércoles.
Ese martes por la noche, el Rebe se sentó desde las 8 p.m. hasta las 10 a.m. de la mañana siguiente. Estando preocupados por la salud del Rebe, sugerí posponer el próximo Yejidus de noche para el jueves, para que el Rebe pueda descansar en el medio".
"El Rebe respondió: 'Aquí hay invitados de Eretz Isroel y Europa. Si posponemos su Yejidus para el jueves, tendrán que quedarse en New York para Shabat, ya que no pueden viajar el viernes.
Esto significa que no estarán con sus familias por otro Shabat, y los invitados de Eretz Yisroel perderán otro día de trabajo, ya que trabajan los domingos. Y todo esto será por mi culpa... "
Ese miércoles por la noche, el Rebe se sentó desde las 8 p.m. hasta las 11:30 de la mañana del jueves".

Ksav Yad - Dando Tzedaká del dinero de la empresa

El dueño de una determinada compañía le escribió al Rebe que había estado dando Tzedaká de la cuenta de la compañía, pero que algunos de los directores se quejaban de que debería donar sólo de su dinero personal.


Con respecto a las quejas de los directores, el Rebe respondió:

אולי זהו הסיבה האמיתית להבלבולים דוקא באחרונה בהקאמפאני, כי צדקה צריכה להיות בסבר פנים יפות ובשמחה

Tal vez es esta la verdadera causa de los problemas que han estado sucediendo justo últimamente en la compañía, ya que Tzedaká debe [darse] con alegría y buena cara.


En cuanto al argumento de que donara solo de su dinero personal, el Rebe escribió:

?אם כן, מאין תבוא ברכת השם להצלחת הקאמפני

Si [lo hace] así, ¿de dónde vendrá la Brajá de Hashem para el éxito de la compañía?


En respuesta a su pregunta de cómo continuar en el futuro, el Rebe escribió:

.כפשוט-ימשיך
   
Obviamente, debes continuar.




jueves, 10 de mayo de 2018

26 de Iyar - R' Aizik Homiler

R' Itzjok Aizik MiHomil (Yortzait 26 de Iyar, 5617) fue un verdadero Maskil en Jasidut, de los Jasidim más grandes que hubo en toda la historia. Josid del Alter Rebe, del Miteler Rebe y del Tzemaj Tzedek.





Algunas 'Perlas' que se oyeron de boca de R' Aizik Homiler:


    • "כי אתה שומע תפילת כל פה": Incluso una Tefilá así, que implica "Tefilat Kol Pe", que sólo pasa por la boca, de la boca para afuera, Tú escuchas.
    • זכור את אשר עשה לך עמלק: Amalek solo puede tocar y dañar al que se encuentra aislado consigo mismo ('Lejá'), separado del resto, más quien está junto a otros Jsidim, Amalek no puede dominarlo. 
En cierta oportunidad, en una Seudá, dijo entonces R' Aizik Jasidut, como de costumbre. Al terminar los Jsidim Baalei Haskolo enseguida fueron a repasar la Toire que habían acabado de oír, mientras que los Baalei Batim siguieron después comiendo como si no hubiera pasado nada. Se dirigió el Baal Habait a R' Aizik y le preguntó: "Todos oimos sus palabras de Jasidut, y todos entendimos, y también las repasaremos al volver a nuestros hogares, ¿por qué entonces estos Jsidim no paran y vuelven a repasarlo enseguida en lugar de seguir la comida?
Al pasar un rato, suena la bocina del correo, que las carretas del correo habían llegado. El cartero enseguida se apresuró en salir y ver si hacía falta más empleados, etc y chequear que esté todo en orden, mientras que el resto de la gente continuó la comida en perfecta tranquilidad.
Se volvió hacia su anfitrión y le dijo: "Mira, en este momento todos hemos oído la bocina, y ¿por qué razón nos quedamos en nuestros lugares en calma, mientras que el cartero salió? La respuesta es, porque ese es su asunto y trabajo, su sustento, por lo tanto le importa y concierne. Aquí está la respuesta a tu pregunta: Esos Jsidim, los "batlonim" que se pierden toda la Seudá, toda su vida es eso, su dedicación, lo que les concierne y les importa, viven con eso, por eso es que vuelven a repasarlo una y otra vez, mientras que el resto...."

Mamtak LeShabat Behar Bejukotai


Un joven entró una vez a una tienda de sombreros y vio un sombrero de "Lord" de caballero inglés, que le gustó, así como la idea: decidió que hoy se transformaría en un caballero inglés, y compró el sombrero; salió a la calle y luego de unos minutos se encontró con un amigo que le dice: "Te ves hoy como un señor, un caballero!" El muchacho sonríe feliz y dice: "Sí, es gracias a mi sombrero" y el amigo lo mira incrédulo y le pregunta, "¿qué sombrero? El joven se tantea su cabeza para sacarse el sombrero y se da cuenta que ni siquiera lo lleva puesto, se lo olvidó en la tienda de sombreros...

***

En nuestra Parasha, "Behar" leemos sobre la Mitzva de Shmitá, "Cuando entren a la tierra... y descansará la tierra un año sabático para Hashem" y a continuación enumera las leyes de la Mitzvá "sembrarás tu campo seis años ... y en el séptimo año, año de descanso será para la tierra".

Si lo analizamos podemos percibir que la Torá por alguna razón comienza a hablar primero del año sabático, el año de descanso, y sólo luego menciona los seis años de trabajo; aparentemente tendría que ser al revés, primero se trabaja durante seis años y luego en el séptimo año descansamos.

Está explicado, que el año de Shmita no es sólamente un año de descanso físico, en ese año se reúnen los agricultores en los Batei Kneset y estudian Torá juntos y con amor al prójimo, así juntan fuerzas y ​​se llenan de energía renovada, un Jayus (energía) que los mantendrá por los próximos seis años; la Torá nos enseña que el Metziut verdadero del Yehudi es justamente como él está en el séptimo año. Es cierto, hay seis años de trabajo, pero debemos recordar que el séptimo año, que es el año de la Kedushá y la espiritualidad es el año en el que el Yehudi se conecta consigo mismo y con su alma, y ​​por lo tanto, también durante los seis años trabajando la tierra se comportará con Kedushá y pureza y cuando lo observen, verán un "Yehudi de Shmita", un Yehudi de Kedusha.

Así es también con los días de la semana. Shabat es el Tajlit (el propósito) y Shlemut (la integridad) de la semana; aunque todos los días de la semana el Yehudí esté tratando con asuntos seculares, sin embargo, debe verse en él que es un Yehudi de Shabat, incluso cuando no esté vistiendo su sombrero de Shabat.

Yehi Ratzón, que aprendamos a ser 'Yehudim de Shabat' en todo lo que hacemos y que merezcamos pronto llegar al día que será todo Shabat y Menujá, de vida eterna, con la Gueula completa muy pronto.

Shabat Shalom!
R' Nejemia Vilhelm
Bet Jabad Bangkok, Tailandia
Traducido por JasidiNews

Video en la nota completa


miércoles, 9 de mayo de 2018

Instantáneas 6 - Anecdotas cortas con el Rebe

Número 6
El trabajo del Baal Shem Tov

Reb Dovberish Shapiro, el hijo del Rebe de Narol, ejerció como director del Jeider de Belz en Williamsburg durante la década de 5710. Muchos de los estudiantes, así como él mismo, vivían en Crown Heights.
Generalmente, los alumnos viajaban con el autobús escolar a Williamsburg, pero en este día, el autobús se averió. Sin tener otra opción, Reb Dovberish se vio obligado a recoger a todos los niños y llevarlos en transporte público. Y así, una procesión de pequeños niños caminaban por las calles de Crown Heights, con Reb Dovberish a la cabeza.
De repente, vieron al Rebe caminando por la vereda, en su dirección. El Rebe se detuvo, sonrió con una amplia sonrisa de satisfacción, y le dijo a Reb Dovberish: "¡Ir tut dem Baal Shem Tov's arbet!" (¡Estás haciendo el trabajo del Baal Shem Tov!).
Esto le cambió el día a Reb Dovberish. Lo que comenzó como una mañana de fracaso miserable, resultó ser un recuerdo que apreciaría para siempre.

Lag Baomer en Buenos Aires con miles de participantes


Más de 2000 chicos de las escuelas primarias de la comunidad judía de Buenos Aires, Argentina se reunieron para un Mega Desfile de Lag Baomer y un día increíble de aventura e inspiración.

El día comenzó con un desfile y marcha por las calles del barrio judío de Once y se congregaron frente al centro Amia para recitar Psukim y escuchar palabras de inspiración del Shliaj Haroshi Rabino Tzvi Grunblatt y del Presidente de la AMIA Sr. Agustín Zvar.

El desfile incluyó hermosas bandas, además de maquetas montadas construidas por los Bojrim de la Yeshiva.

La reunión central se llevó a cabo en el gimnasio del centro deportivo Hacoaj con la recitación de los 12 Psukim por representantes de 7 escuelas diferentes de Jabad. El rabino Tzvi Grunblatt inspiró a la multitud con un mensaje de unidad y orgullo. Una banda en vivo (Tiembla el Mohel), y un show espectacular.

Las escuelas marcharon frente a la multitud liderada por la banda de Tzivot Hashem y dos bandas de marcha militares de Granaderos.

Un agradecimiento especial al personal de Jabad Lubavitch Argentina, Shlujim de los Batei Jabad, Estudiantes y Shlujim de la Yeshiva, Mesivte y Seminario B'not Israel, Tzivot Hashem dirigido por el rabino Shloime Taubenfligel, y a todos los patrocinadores, por el increíble éxito de este día tan extraordinario.

(Sfirat Haomer: El video contiene música) 





martes, 8 de mayo de 2018

Instantáneas 5 - Anécdotas cortas con el Rebe - Sensibilidad

Número 5
Reb Jesed Halbershtam, un asistente en la casa de la Rebetzn, recuerda muchos casos en los que percibió la sensibilidad del Rebe a los sentimientos de la Rebetzn:
"Sucedió una vez que mientras le servía al Rebe y a la Rebetzin la sopa en la Seudá de Purim, el Rebe mencionó el minhag de comer kreplaj en Purim. La Rebetzn se veía muy perturbada. Apresuró a disculparse por haberse olvidado de hacer los kreplaj. El Rebe probó de la sopa, pero enseguida se detuvo, no siguió tomando la sopa. Luego de un rato, me levanté para servir el plato de pollo, y el Rebe me pidió que dejara la sopa sobre la mesa. Cuando traje el pollo, el Rebe tomó un pedazo de pollo, lo envolvió en una Jalá y lo dejó caer en la sopa. "Ahora tenemos kreplaj", le dijo a la Rebetzin con una sonrisa..."

23 de Iyar - Yortzait R' Shneor Zalmen Vilenkin, el Melamed del Rebe


 R' Shneor Zalmen Vilenkin (Yortzait 23 de Iyar, 5723) fue un Josid Talmid Jojom que vivía en Yekatrinoslav, y tuvo el mérito de ser el Melamed del Rebe en su infancia.

El Rebe le retribuyó y agradeció por esto. Sus últimos años, R' Zalman vivió en los Estados Unidos donde sirvió como Mashpia. Cuando estaba en lo del Rebe, el Rebe lo trataba con gran respeto, tanto cuando entraba a su sala, a Yejidut como en los Farbrenguens públicos. [Al entrar en Yejidut el Rebe le ofrecía y le pedía que tome asiento. Cuando Reb Zalmen se negó, por respeto al Rebe y como se estila entre los Jsidim (a no sentarse en el momento de Yejidut), el Rebe le dijo que él tampoco se sentaría hasta que Reb Zalmen accediera a sentarse, y sólo entonces el Melamed sin otra opción procedió a sentarse y luego el Rebe se sentó.] Reb Zalmen también participó en los Farbrenguens del Rebe, y en estos Farbrenguens se notaba una suma reverencia del Rebe por quien fuera su maestro en el pasado. 
Cuando falleció R' Zalmen, el Rebe participó en la Halevaya e incluso viajó hasta el cementerio. Además el Rebe pagó un tercio de los gastos de su Matzevá.

lunes, 7 de mayo de 2018

Likutei Sijot I Behar 5778


domingo, 6 de mayo de 2018

22 de Iyar - R' Mot'l Shusterman, el Baal Koire del Rebe


R' Mordejai Shusterman (Yortzait 22 de Iyar, 5755) nació en la aldea jasídica Zlobin y se crió y estudió en las Yeshivot clandestinas de Tomjei Tmimim bajo persecuciones del régimen comunista. Luego de la segunda guerra mundial salió de Rusia y se asentó junto a su familia en Crown Heights. Se dedicó a la impresión de los Maamarim y libros de los Rebeim, fundó la famosa e histórica imprenta Ezra (donde salían publicados todos los nuevos e inéditos Maamarim y Ksovim), bajo directa instrucción del Rebe.

Fue un experto Baal Kore, y sumamente preciso en pronunciación (Dikduk). Tuvo el mérito de ser el Baal Kore (fijo) en el Minian del Rebe, durante los Shabatot y Yom Tob, durante casi 40 años.

Escribió una interesante biografía junto a una recopilación de anécdotas que escuchó durante su vida de todos los Rebeim y Jasidishe Maises en general, además de un Likut sobre la correcta pronunciación y lectura de la Torá, los Taamim y Nekudot: "Lemaan Yedu... Banim Yevaledu" (Para leer online este libro, disponible desde el sitio de la Biblioteca de 770, aquí)



***

Behashgajá Pratit, en este mismo día recibí una interesante anécdota con su hijo, R' Guershon Shusterman: mientras ejercía como director del Beit Jabad en Long Beach, California en 1971, recibió una llamada en la oficina del Rabino Biniomin Klein, uno de los secretarios del Rebe.

El rabino Klein le dijo que lo estaba llamando con un mensaje del Rebe, que dijo que era en respuesta a una carta.

"No le pregunté nada al Rebe", respondió el rabino Shusterman con perplejidad. "¿Estás seguro de que es para mí?"

El rabino Klein le aseguró que así era y transmitió el mensaje del Rebe: "La idea de construir una Mikve en Long Beach es extremadamente importante, y para acelerar el proceso, enviaré un cheque por $ 1.000 por entrega especial (inmediata)".

El rabino Shusterman colgó e inmediatamente se contactó con los otros Shlujim de Jabad en el área, pero ninguno de ellos le había escrito al Rebe acerca de una Mikve.

Al día siguiente, el rabino Klein volvió a llamar a la oficina del Beit Jabad y explicó que el Rebe le había aconsejado que hablara con alguna de las rebbetzins sobre la construcción de la Mikve.

Rab Mendel Futerfas, un hombre de Mesirut Nefesh que pasó años en prisión por sus actividades a favor de la vida judía en la Unión Soviética, viajaba a Long Beach cada año para una reunión jasídica, donde daba consejos y aliento a la comunidad .

Al darse cuenta de que no había Mikve en Long Beach, Rab Futerfas había alentado a la multitud en la reunión aquel año para que construyan una.

Resultó que una de las mujeres presentes había escrito una carta a su madre describiendo aquella reunión. Su madre, Miriam Popack, miembro del comité ejecutivo de la Organización de Mujeres Lubavitch, presentó esta carta al Rebe. El Rebe inmediatamente le pidió a su ayudante que transmitiera su respuesta.

Este incidente inspiró a la comunidad a construir una hermosa Mikve.



Instantáneas 4- Anécdotas cortas con el Rebe

Número 4

A cuenta mía


Yom Kipur, 5734 (1973): estalló la guerra en Eretz Israel.
El caos estalló. En los primeros días, Am Israel perdió muchas vidas en el campo de batalla.
La Sra. Freiman estaba en lo del Rebe para Tishrei. Tan pronto como se enteró de que su esposo Reb Meir había sido reclutado, decidió regresar a Eretz Israel.
El día 11 de Tishrei, se paró en la puerta del Rebe, acompañada de su padre Reb Boruj Pariz. Estaban esperando que el Rebe salga para Maariv, cuyo momento la Sra. Freiman podría acercarse al Rebe para recibir las brajot.
El Rebe salió de su habitación e inmediatamente hizo un gesto con ambas manos a los dos. Reb Boruj comenzó a llorar mientras le contaba al Rebe que su yerno, el esposo de la Sra. Freiman, estaba en el frente egipcio.
El Rebe escuchó atentamente mientras Reb Boruj hablaba.
Cuando terminó, el Rebe se volvió hacia la Sra. Freiman y le dijo con dulzura: "Regrese a casa en paz, y encontrará que todos gozan de buena salud. Cuando tenga buenas noticias para contar, haga una llamada por cobrar a mi cuenta..." 

jueves, 3 de mayo de 2018

Mamtak LeShabat Emor 5778


Hace unos cuarenta años había un Yehudi en Israel que su hija se enfermó gravemente y los médicos no podían encontrar una cura a su enfermedad. La situación empeoró y fue entonces que se encontró con un Jabadnik que le sugirió que escribiera una carta al Rebe. El Rebe envió una brajá para la pequeña y sugirió que revisen la mezuzá de la puerta de su pieza. Al revisarla la encontraron Psula (inválida), cambiaron la mezuzá y la niña enseguida se recuperó. Este Yehudi le escribió luego al Rebe que quería agradecerle por la Brajá, pero también tenía que hacerle una pregunta: "Compré una mezuzá para cada habitación de la casa, puse una mezuzá en la puerta de la pieza de mi hija, ¿qué culpa tengo que la mezuzá esté Psulá? ¿Acaso, por eso merezco el castigo que mi hija se enferme? Y si Di-s no quiera, no le preguntaba nada ni cambiaba la mezuzá, ¿quién sabe qué hubiera pasado?".

El Rebe le responde con un ejemplo: un grupo de soldados que sale al campo de batalla y el comandante les dice que todos deben usar cascos porque el lugar es peligroso. Uno de los soldados no se dio cuenta de que su casco estaba rajado, le arrojaron una gran piedra. El casco se quebró y él quedó herido. Cuando el comandante viene a visitarlo, el soldado le pregunta: ¿Por qué fui merecedor de este castigo, de haber quedado herido? He seguido las instrucciones, ¿Cómo iba a saber que el casco estaba agrietado?" El comandante le dice: "Estimado soldado, está claro que no recibiste un castigo, actuaste correctamente, pero qué le vas a hacer, el casco no te protegió porque no estaba eficiente" Con esta base el Rebe le escribe: "La mezuzá se supone que proteja a los residentes de la casa. 'Shomer Daltot Israel'. Cuando me escribiste que tu hija está enferma y no pueden encontrar una cura, entendí que había algo que faltaba en la defensa, por eso es que sugerí que se revise la Mezuzá; al corregir la defensa, la niña se recuperó."

En la Parashá de esta semana tenemos la ordenanza de contar el Omer, 'Y contarán para ustedes...siete semanas'. En estas semanas contamos los días y nos preparamos para la entrega de la Torá por medio de refinar nuestras Midot y emociones de manera que estemos listos, como en la entrega de la Torá, "como un solo hombre con un solo corazón."

Es sabido que durante este período de Sefirat HaOmer observamos costumbres de luto debido a los 24.000 estudiantes de Rabi Akiva que murieron durante este período. Jaza'l nos cuentan que murieron porque "no se respetaban los unos a los otros". Esto es completamente incomprensible. Estamos hablando de los discípulos de Rabi Akiva, aquel que enseñó que "Amar a tu prójimo como a ti mismo es una gran regla en la Torá" ¿Y cómo puede ser que fallaron en 'la gran regla' de su rabino y maestro?
Y en segundo lugar, incluso si fallaran, ¿merecían morir por algo así?  Explica sobre esto el Jasidut que no se pelearon en el sentido simple y literal de las palabras, sino que cada uno de ellos pensó que el es aquel que comprende la intención del Rab de la manera más correcta y no tuvo en cuenta la comprensión y punto de vista de su colega, y como estudiantes de Rabí Akiva, se exigía de ellos principalmente hincapié en amor y respeto al prójimo. Particularmente en este momento del año, de preparación para la entrega de la Torá, cuando todos tratamos de fortalecernos en el Ahabat Israel, cuando ellos no lo hicieron carecieron entonces de la protección que la Mitzvá de Ahabat Israel otorga, y por lo tanto en el momento que se desató una epidemia no estuvieron protegidos y contrajeron la plaga.

Por supuesto, debemos aprender a no subestimar ni despreciar a los demás, incluso si se ve diferente a mí o piensa diferente a mí, y durante la cuenta del Omer y los días de preparación para la entrega de la Torá fortalezcamos nuestras defensas incrementando en Ahabat Israel, que nos traerá pronto el Goel y nos preparará para recibir la Torá con verdadera unión en Am Israel.

Shabat Shalom!
Rab Nejemia Vilhelm
Beit Jabad Bangkok, Tailandia
Traducido por JasidiNews

martes, 1 de mayo de 2018

Las vivencias de Lag Baomer con el Tzemaj Tzedek - del Likutei Diburim del Frierdiker Rebe

En el diario del Rebe Anterior aparece una fascinante descripción de Ziknei HaJsidim que rememoran, cada uno en su estilo particular, el día de Lag Baomer con el Tzemaj Tzedek y toda su comitiva. Evento que tomó un lugar trascendental en lo del Tzemaj Tzedek.

Likutei Diburim, Likut 30, Lag Baomer 5709


20 de Iyar 5626, Lubavitch

 [...] 

En las Seudot de Shabat estuvieron presentes varios invitados ilustres, R' Abrohom Aba Person, R' Shmuel Halevi Horovitz. La Seudá de la noche de Shabat se extendió hasta luego de la medianoche. Incluso se sumó a la mesa mi distinguido maestro, R' Nison Skoblo, que amaba oír anécdotas jasídicas de primera mano.

 [...] 

El primero en compartir recuerdos fue el conocido Josid R' Janoj Hendel [Kurnitzer], quien comenzó relatando:

 "En mi primer año en Lubavitch, en 5604 (תר"ד; 1844), Lag BaOmer cayó un martes. Lag BaOmer se celebró como lo hacían de antaño, salir de la ciudad, a veces a la llanura frente a la hacienda Hanorov y, a veces, a un campo llano en un pueblo llamado Ajremovo. 

En aquel tiempo, un Josid llamado R' Shlomo ben R' Shimshon ejercía de arrendador en la hacienda de Hanorovo. Era un Josid del Miteler Rebe. Y en Ajremovo vivía un anciano Josid llamado R' Yosef Mijoel ben R' Feivish Moshe, que había sido un Josid del Alter Rebe.

"El lugar donde se haría la celebración solía definirse con una o dos semanas de anticipación, por lo general haciendo sorteo entre estos dos tradicionales anfitriones.
El ganador invitaba a los Jsidim 'Yoshvim' (estudiantes ya casados) [de Lubavitch], junto con todos los invitados que venían (de afuera), el día anterior a Lag BaOmer, y después de una temprana Minja disponía una Seudá (comida festiva) completa con pescado y carne que duraba hasta Maariv. En el transcurso de la comida uno de los participantes decía de memoria un Maamar de Jasidut, y otros intercambiaban Jasidishe Maises, cantaban nigunim y bailaban. Generalmente nos quedábamos despiertos toda la noche y rezábamos luego temprano con un minian, a ritmo moderado y calmo, y también beArijus (en extenso). A las once había lista una comida láctea, con abundante Mashke, y a partir de las tres aproximadamente esperábamos que llegara el Rebe [el Tzemaj Tzedek].

Ese año (5704), R' Yosef Mijoel ganó el sorteo.

Desde el comienzo del mes de Iyar, el Rebe había permitido nuevamente a sus Jasidim que vengan a Lubavitch, después de haberles prohibido hacerlo durante todo el invierno debido a todas las tribulaciones que habían tenido desde el comienzo de MarJeshvan hasta cerca de Pesaj [las acusaciones  y denuncias de los Maskilim ('iluministas') en Vilna].

"Durante ese invierno, el Rebe había recitado Maamarim sólo en limitadas ocasiones: en Shabat Parshat Vayetze, el nueve de Kislev, en Yud-Tes Kislev; en Shabat Rosh Jodesh [Tevet], Shabat Januca; el 24 de Tevet, Shabat Shira y Purim. E incluso en esas ocasiones los Maamarim habían sido dichos en su pequeño minian privado que incluía algunos de los Yoshvim.

La alegría de la celebración de Lag BaOmer ese año fue doble y redoblada."


"Esa noche, cuando los Jsidim mayores (más ancianos) se reunieron alrededor de una mesa para hacer farbrenguen juntos, R' Aizik Homiler reprochó a [su reverenciado y amado colega] R' Hilel Paritcher que hacía Hidurim en exceso. Para explicar su punto, tomó la regla [relativa a los defectos que hacen que un animal sea Taref] que 'una [extremidad] superflua (de más) es equivalente a una [extremidad] faltante'.

"R' Hilel se puso a llorar, y con amargas lágrimas, R. Hilel le suplicó que no lo acusara de actuar erróneamente por presunción o arrogancia, Di-s libre.
 R. Hilel continuó así con un espíritu de súplica, pero de sus muchas palabras sólo recuerdo lo siguiente: 'En los cuatro meses durante los cuales me preparé para entrar a Yejidut al [Miteler] Rebe, provoqué que mi cuerpo esté en un nivel de 'bueno', y no sólo 'correcto'. Que el cuerpo esté bien, no sólo tenga razón."
Otra cosa recuerdo: 'Es una pena perder el tiempo con argumentos y respuestas: cada momento es precioso'.

"Uno de los Yoshivim, Moshe Dovid de Avtzuh, se emocionó con estas palabras y se llenó de lágrimas, diciendo : 'Ahora entiendo por qué las dos ocasiones en que entré al Rebe en Yejidus no me hicieron efecto, porque para que haga efecto el Yejidus exige una preparación de Avodá real y práctica, sin esto no sirve."

"Esas veinticuatro horas, desde nuestra llegada a la casa de R' Yosef Mijoel en Ajremovo hasta que el Rebe [el Tzemaj Tzedek] llegó durante el día de Lag Baomer para dar su bendición a la celebración, pasaron como un par de horas, de la tremenda alegría  y el placer espiritual en ese tiempo."

"El Rebe dijo un Maamar (comenzado con las palabras Eid HaGal HaZeh VeEidah HaMatzeivah), y después de unas dos horas se fue de regreso a su casa".