lunes, 29 de agosto de 2016

R' Mendel Futerfas: "No perdí nada!"


El mashpia Reb Mendel Futerfas contó numerosas historias sobre su tiempo pasado en la cárcel soviética y en Siberia. Cada historia expresa una lección en nuestra Avoidas Hashem (servicio a Hashem).
Uno de los puntos principales de la supervivencia de los prisioneros era el de no dejar que el entorno y la situación amargue sus espíritus. Hacían fiestas, jugaban con cartas y trataban de ser optimistas.
Una vez, mientras estaban pasando su tiempo libre contando chistes etc., de repente, uno de los presos en ese cuartel comenzó a sollozar y no podía parar. Después de unos minutos, el líder del grupo le preguntó: dime, ¿por qué lloras ahora, no podemos dejar que se den cuenta que estamos quebrantados!
El hombre respondió: "¿Cómo no voy a llorar? Estamos tratando de pasar un momento agradable, y esto me recuerda a lo que yo era hace apenas seis meses. Ahí realmente la pasaba bien. Yo era el médico en jefe de la ciudad, cada problema médico difícil me lo traían a mi . Todo el mundo trataba de asegurarse de que yo y no otro de los numerosos médicos trate a ellos y su familia. Me invitaban a todas las funciones importantes. Yo era realmente feliz.
Mírame ahora, a nadie le importa o sabe que soy un médico famoso. Todos los años de estudio y experiencia para nada. De hecho me siento como si yo no soy nada, así que ¿cómo no voy a estar triste!"
El líder de ese grupo, se levantó y dijo: ¿Por qué crees que tu situación es única. Yo era el abogado superior de toda la región. Yo era capaz de exigir un precio muy alto por mis servicios y también fui invitado a todas las reuniones importantes, y ahora, estoy en el mismo lío que estás vos.
Otro prisionero luego se levantó y dijo, sus problemas no son nada en comparación con la mía. Yo solía ser la persona más temida en toda la región. Todo el mundo temblaba cuando me veía, envié un sinnúmero de personas inocentes a la cárcel e incluso a la muerte, sólo para poner miedo en todos. Y entonces un día mis subordinados alegremente me detuvieron bajo cargos falsos y me redujeron a un nadie.
Esta conversación fue continuada por cada persona, diciendo como fueron pasados de ser importantes a un don nadie. Durante todo el tiempo Reb Mendel escuchaba entretenido y una sonrisa se notó en su rostro, que fue observada por algunos de sus compañeros de prisión y que deliberadamente le preguntaron, ¿por qué te parece esto divertido?" ¿No perdiste algo de prestigio o importancia?" Preguntaron. "Lo que eras antes de que te manden aquí y lo que sos ahora?!!
Reb Mendel respondió: "Antes de que me arresten, intenté ser un Josid, y servir al Creador con lo mejor de mi capacidad y esta misma misión aún permanece, hasta el día de hoy. El lugar y sus alrededores puede que sean diferentes, pero el objetivo sigue siendo el mismo.
Así que sí, estamos en Golus y oscuridad, pero nuestra misión sigue siendo la misma.


(Adaptado por R Sholom Avtzon)

No hay comentarios:

Publicar un comentario